viernes, 12 de octubre de 2007

Dictado del 12-10-07

Hijos queridos de Dios Altísimo. Yo soy Miguel Arcángel, el Príncipe Celestial. Yo vengo a preveniros del Mal, del Maligno, el gran enemigo de Dios. El quiere destrucción en vuestras vidas. El quiere destruir vuestros matrimonios, vuestras relaciones familiares, vuestros lazos consanguíneos, el quiere destruir por doquier. No podéis seguir ese juego, tenéis que hacer oración mas asiduamente, para que el enemigo de las almas no os venza.

No os creáis más listos que él. El tiene una inteligencia de ángeles aunque la usa para el mal, el es mucho mas inteligente que vosotros, por eso, solo con el Espíritu Santo, Espíritu de Dios Altísimo, podéis vencerle y, este Espíritu Santo, os viene muy velozmente a través de la oración fervorosa y de fe.

Tenéis que practicar los sacramentos pero hacedlo con las debidas disposiciones, no se puede ir a comulgar sin confesarse (1) y, debéis confesaros asiduamente, aunque no tengáis pecados graves, porque el Sacramento de la Penitencia os da fuerza para las tentaciones.

Hijos de Dios Altísimo, yo os hablo Miguel, el Ángel que se opone al demonio y deseo indicaros el camino de la salvación eterna.

(1) Si se tienen pecados graves, aunque es aconsejable confesar de vez en cuando los pecados leves y faltas cotidianas.

Dictado del 11-10-07

Los pecados de los hombres son pedradas para Cristo y la Santísima Trinidad. Los pecados son ultrajes, heridas, saetas envenenadas que llegan al Corazón de Dios.

El hombre peca impunemente, no se cansa de pecar y aunque el pecado no le da la felicidad, peca cada vez con más monstruosidad, buscando sensaciones y vicios que le llenen. Nunca el pecado llenará al corazón humano. Dios no lo ha hecho para el pecado, lo ha hecho para El, por eso, solo El llenará las ansias de felicidad del hombre. Pero esta lección no la aprenden, parece que predicar o advertir estas cosas, son ñoñerías, sin base alguna. Cuantos grandes pecadores se convirtieron y ya no quisieron volver a pecar, porque el pecado nunca les dio la felicidad, ni la paz.

Almas queridas de Dios Omnipotente, Yo os hablo en nombre de la Santísima Trinidad y os pido que experimentéis en vosotros mismos esto que os digo. Abandonad el pecado de una vez por todas, y limpiaros de tanta podredumbre como anida en vuestras almas.

Yo Soy el Espíritu de Dios que os trae sabiduría para que os la apliquéis en vuestras vidas. El infierno es la consecuencia del pecado, y allí, no hay ni un ápice de felicidad, porque el pecado nunca puede producir felicidad, ya que es un mal y los males, por esencia, nunca pueden dar ninguna clase de bien, y la felicidad es un bien.

El pecado trae codicia, egoísmo, ira, soberbia, mentira, vanidad, pereza y toda clase de males y vicios y pecados capitales. No os puede dar bien alguno, por eso, ningún pecado puede traer ninguna clase de bien, ni al alma, ni al cuerpo. Esclaviza a la voluntad y la debilita cada vez mas, haciéndola incapaz de salir de la situación de pecado.

Cada pecado es un hundirse mas en el fango y ya solo la gracia (especial) de Dios, puede hacer que un pecador empedernido, vuelva al buen camino, porque el pecador por si solo no puede salir del fango. ¡Pedid, almas de Dios esa gracia para los pecadores! Pecadores que están en vuestro hogar, en vuestra comunidad de vecinos, en vuestro trabajo. Orad por ellos sin cansaros, para que esas plegarias les sean aplicadas y retornen al camino recto de la salvación eterna.

Una vez muertos, ya no podéis aplicarle oraciones si se condenan, hacedlo ahora que aun viven y pueden posponer su actitud. El Corazón de María Inmaculada es una fuente inagotable de gracias para el pecador, acudid a ese Santo Corazón y pedidle favor para los pecadores. Yo os hablo Espíritu de Sabiduría y Bondad. Alabado sea Dios.

Invocadme a menudo

Hijos míos, Yo soy Vuestra Madre del Cielo y vengo a vosotros por medio de este escrito. Ya Mi Divino Hijo os ha advertido de que debéis de estar instruidos en los puntos de la fe católica para no dejaros confundir, porque la ignorancia, hijos míos, os puede hacer que el error os alcance y perdáis vuestra fe.

Venimos a instruiros para que no os equivoquéis, es importante que leáis el Nuevo Testamento y lo meditéis, incluso que forméis grupos en que se lea y alguien preparado, sacerdote o no, os lo explique. Hacedle preguntas, no os quedéis con duda, preguntad para que después sepáis contestar.

Yo soy María Inmaculada, Vuestra Reina, Madre y Señora, y debéis honrarme con amor verdadero, no solo en vuestros rezos a Mí, sino también en vuestro vestir, conversaciones, composturas, medio de vida. En vuestros trabajos debéis ser honestos y cumplir vuestro deber diligentemente. Os pagan por ello y no podéis emplear el tiempo en actividades personales, no si en ese tiempo TENEIS COSAS QUE HACER DE VUESTRA EMPRESA (1)

Hijos, cualquier imperfección os predispone al pecado, mucho mas si es deliberada y no vale decir que todos lo hacen.

Hay quienes se pasan las horas del trabajo haciendo crucigramas o leyendo libros que se traen de casa, posponiendo sus obligaciones laborales. Eso es también robar, pues si bien cuando hayáis hecho vuestras obligaciones os sobra tiempo y podéis leer, no antes de hacer lo que debéis.

Tenéis que ser hijos santos en todo vuestro medio de vida, en todo momento y, aunque al principio os cueste, veréis como con el buen habito, llegáis a hacerlo con normalidad y sin esfuerzo. Todo lo que hagáis en vuestra vida os tiene que llevar a Dios y predisponeros a una vida de santidad ejemplar e intachable.

Invocadme a menudo Yo os escucho y, me alegro mucho cuando algunos de mis hijos, en medio de las tareas cotidianas, se acuerda de Mi. Os amo Hijos de Mi Corazón Inmaculado y os doy la paz de Mi Hijo Jesús.


(1) Las letras se ponen solas mayúsculas.

Dictado del 10-10-07

Hijos Míos, la advertencia de los últimos tiempos no es para que viváis relajados o despreocupados, es para que cambiéis de hábitos y donde tenéis afán de cosas materiales, pongáis afán de cosas espirituales. Haced lectura espiritual, informaros bien de la Sagrada Escritura con libros de buenos autores. Estad instruidos, apuntad en un papel o libreta los puntos básicos de Mi doctrina, para que cuando os quieran confundir o tender una trampa, sepáis defenderos según Mi santa doctrina y Evangelio.

No esperéis que todo os lo den hecho. Vosotros tenéis que poner de vuestra parte todo cuanto sea posible, porque el mal es muy sutil y os puede confundir en un instante, incluso aunque seáis Mis fieles seguidores. No sabéis como disfraza Satanás el mal de bien, es algo en el que lo hace con verdadera maestría y, sino recordad a mis hijos Adán y Eva.

La serpiente sigue hoy actuando como entonces, pero ahora se disfraza de misericordia y de muchas otras cosas que no podéis imaginar, pero el caso es hacer sus objetivos. Es deber vuestro instruiros, porque el estar preparado e instruido es ya una verdadera arma y Satanás busca a los incautos que sabe que por falta de instrucción, caerán en masiva.

Os avisamos desde el Cielo para esta acometida pero parece que os dormís, no reaccionáis, os quedáis solo en la letra, pero no lo ponéis en práctica y, vuestras vidas siguen siendo mediocres y mundanas.

Algunos fieles habéis añadido (en vuestra vida) el Santo Rosario pero lo rezáis cuando os apetece, sin esfuerzo, ni fervor. Tenéis que mejorar, confesaros, asistir a la Eucaristía siempre que podáis, visitadme en el Sagrario y leer cosas santas y puntos de vuestra fe y Mi Evangelio.

Yo Soy Jesús, Redentor del mundo. Nunca dejo a Mis ovejas, bajaría a cada casa a instruiros pero ya os aviso por medio de este escrito y por medio de tantos, tantos otros que circulan por el mundo. Soy el Salvador y lo que pretendo es salvaros de nuevo y preveniros de engaños y falacias que os van a presentar, incluso a sacerdotes, porque muchos caerán en la mentira por relajación, comodidad y falta de fe.

Así pues, hijos Míos, sed astutos como serpientes y sencillos como palomas, (Mt 10.16) porque el enemigo no duerme ni descansa para hundiros y llegar a poseer vuestras almas. Yo, Jesús de Nazaret.