La Santisima Virgen, bajo el nombre de Señora de todos los pueblos, se apareció el 25 de marzo de 1945 en Amsterdam a Ida Peerdeman trasmitiéndole el primero de una serie de 56 mensajes a lo largo de 15 años.
En estos mensajes María pide explícitamente al Papa y a la Iglesia la proclamación de un nuevo dogma: el de María Corredentora, Medianera y Abogada, como colofón de la doctrina mariana. Cuando este dogma sea proclamado, Ella promete dar la paz, la verdadera paz al mundo.
El 11 de febrero de 1951, aniversario de las apariciones de Lourdes, la Señora dicta una sencilla oración:
La imagen es la representación y preparación de este dogma. El 31 de mayo de 1996, el Obispo de Haarlem-Amsterdam, Mons. Bomers, y su auxiliar, Mons. Punt, autorizaron en una declaración oficial la veneración pública de la Virgen María con el título de "Señora de todos los pueblos"
En estos mensajes María pide explícitamente al Papa y a la Iglesia la proclamación de un nuevo dogma: el de María Corredentora, Medianera y Abogada, como colofón de la doctrina mariana. Cuando este dogma sea proclamado, Ella promete dar la paz, la verdadera paz al mundo.
El 11 de febrero de 1951, aniversario de las apariciones de Lourdes, la Señora dicta una sencilla oración:
Señor Jesucristo, hijo del Padre, manda ahora tu Espíritu sobre la tierra. Haz que el Espíritu Santo habite en el corazón de todos los pueblos, para que sean preservados de la corrupción, de las calamidades y de la guerra. Que la Señora de todos los pueblos, que un día era María, sea Nuestra Abogada. Amén.
La imagen es la representación y preparación de este dogma. El 31 de mayo de 1996, el Obispo de Haarlem-Amsterdam, Mons. Bomers, y su auxiliar, Mons. Punt, autorizaron en una declaración oficial la veneración pública de la Virgen María con el título de "Señora de todos los pueblos"