Se dice por ahí que Dios no es bueno, porque Dios castiga con un castigo eterno que se llama Infierno. Se dice que Dios no puede ser Padre, porque castiga para toda la eternidad, y que un padre, no puede castigar eternamente a un hijo. Estas doctrinas que confunden a cualquiera por la falta de preparación, son doctrinas satánicas, y Satanás las siembra en las almas débiles y mal preparadas para que cunda el error y el engaño, pero hijos, ¿cómo podéis ser tan necios y seguir este juego satánico que no es ni más ni menos que para desmerecer a Dios Todopoderoso y crear confusión?
El Infierno es un dogma de la fe católica y existe desde siempre, porque Dios Todopoderoso de bondad infinita es también un Dios de justicia infinita y si no hubiera un castigo para los malvados, todos serían malos sin excepción, porque es más fácil vivir la vida de pecado que la vida de la gracia.
Dios es un Padre amoroso que os da la vida divina de la gracia en vuestras almas. Os alimenta constantemente, pero vosotros hijos, el alimento que os da Vuestro Padre no lo queréis tomar, lo escupís con rabia porque no queréis someteros a las leyes divinas, que no serían para vosotros un sometimiento sino una liberación de vuestros vicios y pecados tan arraigados.
Soy el Espíritu de Dios quien os habla, el Espíritu Santo que procede del Padre y del Hijo. Pero vosotros hijos de la Santa Madre Iglesia oís antes la voz del mal espíritu que la Mía y, creéis antes a Satanás que al Espíritu Santo. Si creéis que existe la eternidad y que es un estado que nunca tendrá fin, debéis creer también que existe un Cielo y un Infierno, porque si no nadie se esforzaría en santificarse ni en dar gloria a Dios, puesto que la salvación, la tendría asegurada desde que nace, y así, el que mata o viola, o roba, tendría el mismo premio que el abnegado, el prudente, el justo. ¿Cómo no razonáis todo esto y os dejáis llevar por ideas tan equivocadas? ¿Cómo sois tan necios de seguir estas corrientes satánicas y posponer los sabios consejos de la Santa Madre Iglesia, prudente y doctora en la cosas de Dios?
Si hijos de Dios, doctores tiene la Santa Madre Iglesia que os están enseñando desde hace siglos, y viene alguien lanzando una doctrina así de errada y equivocada, y le dais la razón aplicándola a vuestras vidas. Recodad lo que dijo el Salvador, por sus frutos los conoceréis, los frutos Míos, del Espíritu Santo, son los que os tienen que valer para ver si vais por caminos divinos o por caminos satánicos, Yo, Espíritu de Dios, os hablo. La paz de la Santísima Trinidad a todo aquel que crea estos escritos.
LOS FRUTOS DEL ESPIRITU SANTO SON:
Caridad, Gozo, Paz, Paciencia, Mansedumbre, Bondad, Benignidad, Longanimidad, Fe, Modestia, Templanza, Castidad.
El Infierno es un dogma de la fe católica y existe desde siempre, porque Dios Todopoderoso de bondad infinita es también un Dios de justicia infinita y si no hubiera un castigo para los malvados, todos serían malos sin excepción, porque es más fácil vivir la vida de pecado que la vida de la gracia.
Dios es un Padre amoroso que os da la vida divina de la gracia en vuestras almas. Os alimenta constantemente, pero vosotros hijos, el alimento que os da Vuestro Padre no lo queréis tomar, lo escupís con rabia porque no queréis someteros a las leyes divinas, que no serían para vosotros un sometimiento sino una liberación de vuestros vicios y pecados tan arraigados.
Soy el Espíritu de Dios quien os habla, el Espíritu Santo que procede del Padre y del Hijo. Pero vosotros hijos de la Santa Madre Iglesia oís antes la voz del mal espíritu que la Mía y, creéis antes a Satanás que al Espíritu Santo. Si creéis que existe la eternidad y que es un estado que nunca tendrá fin, debéis creer también que existe un Cielo y un Infierno, porque si no nadie se esforzaría en santificarse ni en dar gloria a Dios, puesto que la salvación, la tendría asegurada desde que nace, y así, el que mata o viola, o roba, tendría el mismo premio que el abnegado, el prudente, el justo. ¿Cómo no razonáis todo esto y os dejáis llevar por ideas tan equivocadas? ¿Cómo sois tan necios de seguir estas corrientes satánicas y posponer los sabios consejos de la Santa Madre Iglesia, prudente y doctora en la cosas de Dios?
Si hijos de Dios, doctores tiene la Santa Madre Iglesia que os están enseñando desde hace siglos, y viene alguien lanzando una doctrina así de errada y equivocada, y le dais la razón aplicándola a vuestras vidas. Recodad lo que dijo el Salvador, por sus frutos los conoceréis, los frutos Míos, del Espíritu Santo, son los que os tienen que valer para ver si vais por caminos divinos o por caminos satánicos, Yo, Espíritu de Dios, os hablo. La paz de la Santísima Trinidad a todo aquel que crea estos escritos.
LOS FRUTOS DEL ESPIRITU SANTO SON:
Caridad, Gozo, Paz, Paciencia, Mansedumbre, Bondad, Benignidad, Longanimidad, Fe, Modestia, Templanza, Castidad.
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